Para reflexionar

Las personas durante su vida, pierden muchas oportunidades de disfrutar momentos de alegría, simplemente por que no saben que existen; y esto es por que no se han atrevido a tomar otros caminos, y romper con sus rutinas.

La fatiga física y emocional, muchas de las veces se relacionan con la monotonía y el enfado, más que con las enfermedades; bajo estas circunstancias, algunos aspectos de la vida pueden parecer sin sentido.

Vale la pena que dediques tu tiempo a tu desarrollo personal, realizando algunas actividades que te motiven, o retomando con interés lo que hasta ahora estas realizando.

Las características de las personas que disfrutan lo que hacen, es que ponen su empeño y atención en lo que hacen, se concentran y evitan distractores. Las que inician actividades que no les entusiasman, se encuentran son sentimiento de frustración, y frecuentemente esto los lleva al fracaso.

La vida ofrece momentos buenos para todos, solo debes estar ahí para tomarlos y disfrutarlos

EJERCICIO

  1. Realiza una lista de tus rutinas diarias durante una semana,

  2. Indica al lado de cada una de las rutinas diarias, el tiempo que le dedicas a cada una de ellas.

  3. Identifica cuales actividades que realizas en estas rutinas son inútiles y suprímelas.

  4. Identifica a cuales de las actividades que te quedan como útiles, les puedes disminuir el tiempo que les dedicas (esto te dejara espacio para realizar actividades que te satisfacen y te brindan alegría)

  5. Anota, actividades que deseas hacer y que nunca tienes tiempo para realizarlas (ir al cine, pintar, coleccionar algo, tocar un instrumento, tejer, cocinar, caminar etc.)

  6. Retoma nuevamente el punto 5 y de manera sincera contéstate si en verdad esto deseas hacer.

  7. Toma una o dos actividades del punto 5, las que te parezcan de mayor interés (para ti, no para tu familia o los demás)

  8. Agrégalas en tu lista de rutina y dales el tiempo que tenían antes las rutinas inútiles

  9. Decide iniciarlas poniendo tu atención, empeño y disfrútalas.

  10. Si tu trabajo es rutinario, toma descansos breves en la jornada, y en este tiempo realiza algo para relajarte un poco (tomar un café, leer una sección de un periódico, movilizarte un poco etc.)

  11. Si las actividades que realizas en tu trabajo no te satisfacen plenamente. Considera la posibilidad de cambiar de trabajo, o de puesto, donde si realices actividades que vallan de acuerdo con tus interesas y/o habilidades.

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